Por una merecida Coronación

    "La Divina Pastora suma más de 300 años de devoción en el barrio de Capuchinos y ya debería de estar coronada. Desde aquí solicito a la Congregación que inicie los trámites cuanto antes. Es necesaria esta coronación y tiene todo mi apoyo

    Diego A. Linde. Estas fueron las palabras de Alfredo López Barranquero, párroco y director espiritual de la Congregación de la Divina Pastora de las Almas de Málaga en la primera Eucaristía realizada en el templo tras las obras del último año (¡qué necesitadas están las Hermandades de sacerdotes así!). Palabras estas que cogieron por sorpresa a todos los pastoreños malagueños y que nos llenan de alegría a todos los que llevábamos tiempo opinando de igual forma.


 

    La Pastora malacitana es una imagen singular, tanto por su calidad como por su inigualable belleza. Atribuida al escultor sevillano José Montes de Oca y realizada en los primeros años del siglo XVIII, conserva su policromía original, tratándose de una de las mejores tallas de la ciudad de Málaga y de las mejores representaciones de la advocación pastoreña, en mi opinión. Su hermosura es capaz de conmover a cualquier fiel sensible, gracias a su profunda unción, que nos atrae e invita a contemplar el misterio que representa. Su porte, tan humano y divino a la vez, la hace maravillosa representación de la Madre de Dios y guía del terrenal rebaño. El barrio de Capuchinos lleva tres siglos a sus plantas, y la invoca por Patrona y principal devoción. Una devoción que tomó especial auge con la labor del Beato Fray Diego José de Cádiz, el Apóstol de la Divina Pastora, que perteneció a la Comunidad malagueña, en la que más años permaneció. Fue él precisamente quien fundó la Congregación que aún hoy le da culto.

    En este mes de mayo tan especial para Málaga en el cual se celebrará la Magna Mariana en honor a la Patrona, la Virgen de la Victoria, y en el que se ha reabierto con esplendores remozados la parroquia pastoreña, la invitación a iniciar los trámites para la Coronación ha tenido una aceptación espectacular en la ciudad, haciendo que escasas horas tras la noticia fueran muchísimas las Hermandades y colectivos que mostraron su apoyo y adhesión a la misma. La ilusión invadió los corazones capuchineros y la Congregación anunció al día siguiente su decisión de ponerse cuanto antes manos a la obra para emprender tan hermoso camino.
 
 

    Personalmente me llena de alegría la idea de que esta imagen, por mi tan admirada, reciba los honores de la Coronación Canónica, sin duda merecidísimos, sirviendo así de reconocimiento a la devoción pastoreña de Málaga y de incentivo aún mayor a la expansión de su veneración. Me gustaría expresar desde aquí todo mi apoyo a la Congregación y a la futura Coronación de la malagueña Madre del Buen Pastor, a la espera de poder aclamar en un día no muy lejano a la Divina Pastora...¡Coronada! 

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