El ajuar de la Virgen de Luna en Villanueva de Córdoba

    Juan Cruz Calero y Diego A. Linde. En la publicación anterior hicimos un repaso por el ajuar de la Virgen de Luna en la ciudad de Pozoblanco. En esta ocasión lo hacemos con el ajuar que la sagrada Imagen posee en Villanueva de Córdoba, pueblo del que también es Patrona.

    Como hemos podido recoger en testimonios y fotografías antiguas de la Virgen en Villanueva, la primitiva talla poseía un rico terno bordado sobre soporte blanco, que se salvó de la destrucción en la guerra civil. Sin embargo, en los años cincuenta sus bordados se aprovechan para la realización de dos mantos, una saya y el simpecado de la cofradía. Nos referimos a los actuales mantos azul y rojo. Lo único que se mantuvo intacto del terno original fue la saya bordada sobre tisú de oro. Adjuntamos una fotografía de la antigua talla de la Virgen de Luna con dicho terno, que era seña iconográfica siempre y cuando permanecía en Villanueva.


    Por tanto, uno de los mantos es el que hoy día se presenta sobre un soporte de terciopelo azul celeste, tal y como fue traspasado por el bordador sevillano Paleteiro en la década de los noventa, puesto que previamente se encontraba sobre un soporte blanco, estando muy deteriorado, pensamos, que por haberlo usado en algunas ocasiones para el camino. La saya compañera de este manto si se mantiene sobre un terciopelo blanco. Ambas piezas poseen un anagrama como motivo central y motivos vegetales. Por la parte trasera podemos darnos cuenta de que efectivamente es un manto del que se han extraído piezas por la sencillez y carencia del diseño.




    El otro manto es de color rojo, estrenado en el año mariano de 1954, de dimensiones mucho menores que el manto celeste que hemos visto anteriormente. Su diseño es de mayor complejidad, ya que conserva muchas piezas bordadas y posee una cenefa en todo su contorno. Se compone de motivos vegetales y algunas flores de gran tamaño, usándose como saya compañera la del terno antiguo original, sin desvirtuar.



    El insigne jarote Don Tomás Sánchez Coleto, donó en 1998 un terno compuesto por manto plata sobre terciopelo verde, saya oro sobre terciopelo beige, toca de sobremanto y traje del niño bordados en aplicación, obra del taller del bordador García Poo.

    En aplicación también posee otro terno que le fue donado en la década de los ochenta, realizado por A. Chaparro, que luce en escasas ocasiones. Sobre soporte blanco, posee en su parte posterior el escudo de la localidad.




    Por último cabe destacar que la Virgen posee una toca de sobremanto bordada en oro sobre tul, un pecherín bordado, y su Divino Hijo un bonito traje bordado en oro con varias piezas de igual diseño.


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